Al igual que la alimentación del ser humano ha ido cambiando, también ellos han modificado sus hábitos alimenticios. Los perros antes carnívoros estrictos han pasado a ser omnívoros, ya que su capacidad metabólica ha evolucionado.

Antes se ofrecía a perros y gatos nuestras sobras más o menos variadas. Hoy en día, en el tema de la alimentación de las mascotas hay opiniones diversas sobre cuál es la mejor formar de cuidarlos a la hora de alimentarlos:

• Están los defensores a ultranza del pienso, que argumentan que es una dieta desarrollada específicamente para las necesidades de cada perro o gato. Ya que en la actualidad, los alimentos comerciales técnicamente evolucionados, satisfacen sus necesidades hasta las más altas exigencias metabólicas de nuestras queridas mascotas.
• Luego están los defensores de la dieta natural – también llamada BARF o ACBA, Alimentación Cruda Biológicamente Apropiada – que persiguen que sus mascotas no ingieran conservantes, colorantes u otros aditivos que la comida comercial para perros o gatos suele contener. Reivindican una alimentación más parecida a la que nuestros perros o gatos tendrían si fueran animales salvajes.

Diversos estudios científicos alertan de los daños que pueden provocar en los cachorros una dieta con insuficiencias en ciertos nutrientes esenciales para el desarrollo como son el calcio, el fósforo, el sodio o el potasio. Este tipo de dietas naturales, en auge en Alemania, provocaron a algunos perros, bocio tóxico debido a la cantidad de tejido tiroideo que consumían al ingerir esta carne cruda. En Suecia, se encontraron cepas de Escherichia coli resistente a la cefalosporina, un antibiótico.

Paul Overgaauw, de la Universidad de Utrech, autor principal del estudio, lo dice claramente: «Está claro que las dietas comerciales basadas en carne cruda pueden estar contaminadas con una variedad de patógenos zoonóticos, bacterianos y parasitarios que pueden ser posibles fuentes de infección en animales de compañía y, si se transmiten, suponer un riesgo para los seres humanos».

Muchos dueños no se fían de las dietas comerciales debido a que creen que sus componentes no son naturales. En vez de eso, lo que hacen es prepararles ellos mismos las comidas, pues creen que si a ellos les sienta bien, a sus mascotas también. Pero esto es erróneo, el metabolismo de los perros es diferente del de los humanos.

Los productos comerciales están hechos por nutricionistas y contienen la información sobre las cantidades adecuadas para cada perro. Los productos llamados Premium tienen este nombre por su mayor digestibilidad para los animales y, evidentemente, por su mayor calidad.

Si en algún momento decidís cambiar de dieta o alimentos de vuestras mascotas, no dudéis en preguntarnos. Podremos recomendarte siempre teniendo en cuenta las calorías y nutrientes necesarios para cada animal.